Corazón de café

Excitante...mmmmmmmmm!!!! Y qué aroma, entrará directo rozando denso tu paladar, resbalando ávido por tu lengua, acariciando tu garganta hasta penetrar en tu torrente sanguíneo y...
La imaginación se dispara y aún hay que molerlo !!!, pero es que ese aroma... despierta las sensaciones del mismo modo como si ese amor excitante ya embriagara tu boca y se hubiera convertido en realidad.
El sabor amargo o dulce, dependiendo del azúcar que tu le añadas, se pega en tus labios antes de ser probado y en ellos buscarás su rastro fuerte y aterciopelado a un tiempo.Su temperatura elevada discurre por tu interior hasta alcanzar la altura de tu corazón. Por esas latitudes se pierde...solo lo reencotrarás en un nuevo sorbo susurrante e imaginario... o tal vez el deseo se convierta en realidad !!!
Cuidado, no todos los corazones están preparados para recibir semejante dosis de efectos y afectos cafeínicos, muchos no lo soportarían, están ya de por si acelerados y temen colapsar !!! Si... El temor pasa factura siempre, entre temer o amar... No hay duda !!!
Mejor degustarlo desde un corazón poderoso, que no tema las emociones ni los sentimientos, que no se resigne a renunciar a semejante placer. No hace falta recordar que el café, si se abusa, puede ponerte como suele decirse, "como una moto".
No todos los cafés son de la misma procedencia ni calidad, si tienes la suerte de que el que tu tomes sea delicioso... seguro que volverás a repetir... qué sentido tiene renunciar a lo que, aún en pequeñas
dosis, ha activado tu ser recordándole que está..Vivo!!!!!
Desde luego que creé este excitante corazón con una taza de café en mis manos, yo nunca le añado azúcar... quedaría excesivamente dulce !!!
Por Elvia Cor el 26.02. 2010.