Corazón Frente al Mar

Un corazón que ama la naturaleza, por fuerza lo vas a hallar inmerso en ella...
La arena será su suelo. Su techo el cielo. El mar sus ropas. El sol, su luz.
No te extrañe de que las formas que contienen su ser, sean armónicas, equilibradas, bien cinceladas.
No te sorprendas si emite una energía feliz, alegre, que cosquillea tu sonrisa hasta hacerla brotar.
Ni que decir tiene que amará a otros seres vivos, que si perros, que si gatos, mariposas o caballos.
Y que si un día su cielo está en los mares, al siguiente lo encontrará en las montañas, en un rio o en un valle.
No dudes de que te mostrará su interior con la transparencia y frescura con la que se arremolinan las aguas.
Que se fijará en lo qué tus manos sostienen, para conocerte.
Que te lo pedirá prestado, para conocerte aún más.
Si te encuentras por casualidad un corazón así, de ese color rojo fuego tan bonito, plácido y fuerte, en la arena de la playa...
Si a tu mirada conquista un corazón así, natural, amante de la naturaleza, que se sumerge en ella...
Qué suerte!!!
Casi lo mejor será que te des un baño para fluir en la naturaleza tu también !!!
Y es fácil que si vas a contemplar el mar, tu corazón sea un corazón natural!!!
Creado con cariño por Elvia Cor.