Corazón de cáscara de huevo

Los huevos tienen corazón... Increíble!!! y se comunican de una forma muy peculiar...
Una buena amiga, después de romper un par de huevos para cocinar un revoltillo, dejó las cáscaras reposar sobre una servilleta de papel.
Tan dulcemente las debió acomodar, a pesar de haberlas partido en dos, que lo que quedaba de ellas, con unas lágrimas de clara, tiñeron su improvisado lecho.
Agazapadas, agarrándose a algún resto por quebrar, dibujaron este corazón que ahora veis.
Lo que me entusiasma de él, no es solo su singularidad y autocreación, sino que mi amiga, al verlo, según me confesó, pensó rápidamente en mi.
Ella cree que ese corazón me pertenece, pero ciertamente me lo entregó porque en realidad, ese corazón quería darse a conocer y no perderse en el cubo de la basura.
En Corazones con Corazón, no importa que con otro mirar eso fueran simples restos orgánicos, aquí tienen un lugar de privilegio.
Mi amiga me envió la foto, a mi me faltó tiempo para recrearla y hacer ese corazón más visible, intensificando y contrastando el tono, dándole un poco de calor a su color agualido y herido.
A ella le entusiasmó el resultado y el darlo a conocer.
Gracias Kiki, se que pones dulzura en tus gestos, en lo que haces, por eso te surgen corazones, aunque acabes de partir el alma de los huevos, en dos...
Avísame cuando hagas una barbacoa o un asado, el resultado puede ser espectacular!!!
Creado por el huevo, fotografiado por Kiki, recreado por Elvia Cor.